Coaching – Metáfora (14) El hombre que preguntó a los muertos
Vivir permanentemente pendiente de la opinión ajena, depender de algún modo de lo que piensan los demás de nosotros representa un caudal feroz de culpa que termina desbordándonos. Aceptemos en nosotros cosas que hemos escogido, pero que les puedan disgustar a los demás. !No busquemos permanentemente la aprobación de los otros!
Este cuento clásico de la India narra la historia de alguien condicionado por las críticas y el rechazo de los demás y del extraño consejo que le dio un sabio. ¿Te atreves leer la historia del hombre que preguntó a los muertos?
Cuentan que hace mucho tiempo un hombre sufría en silencio, pues se sentía muy condicionado por los demás, tanto por sus halagos y alabanzas como por sus críticas y rechazo. Resuelto a afrontar esta situación decidió visitar a un anciano con fama de sabio.
Una vez escuchada la situación del hombre el, sabio meditó un momento y le dijo:
- Sin formular pregunta harás exactamente lo que yo te mande. Ahora mismo irás al cementerio y dedicarás varias horas a halagar y verter alabanzas a los muertos. Después vuelve.
El hombre obedeció y se encaminó al cementerio, donde llevó a cabo lo ordenado. Al regresar, el sabio le preguntó:
- ¿Qué han contestado los muertos?
- No han contestado nada – respondió el hombre-. ¿Cómo podrían hacerlo si están muertos?
Tras cerrar los ojos un instante, el anciano volvió a ordenar:
- Regresa nuevamente al cementerio e insulta a los muertos durante varias horas.
El hombre no comprendía nada, pero obedeció de nuevo. Después de insultar a los muertos, regresó otra vez ante el sabio. Éste preguntó al hombre:
- ¿Qué han contestado los muertos ahora?
- Tampoco han contestado nada. ¿Cómo podrían hacerlo si están muertos?
El viejo lo miró entonces a los ojos y le dijo:
– Que esos muertos sean en el ejemplo en que te mires. Igual que ellos murieron, ha de morir en ti tu importancia personal. Si ella muere no habrá quien reciba halagos ni insultos, y entonces quedarás libre y no te sentirás ya nunca condicionado por los demás.
Fuente general: Tradición hindú.
Nota: Me gustaría dedicar este post a Chusi Otero, participante en la I Edición del Taller de Inteligencia Emocional «IE2″ en Valladolid (Septiembre 2013).
MaRTa_DBG
oct 03, 2013 @ 09:50:43
Por alguna razón, tus metáforas siempre llegan, el día adecuado, a la hora adecuada… Gracias!! … Como siempre, se le puede sacar mucho jugo a tu post…
Pablo Villanueva
oct 03, 2013 @ 10:00:36
Supongo que nada es casual, Marta! Gracias por tu visita, lectura y comentario. Me alegra que lo que publico te resulte de utilidad. Un abrazo grande.
MaRTa_DBG
oct 03, 2013 @ 11:11:20
Yo también lo supongo. La vida está llena de causalidad. Gracias a tí! Siempre muy útiles y certeras tus publicaciones. Abrazo grande!
Chusi
oct 03, 2013 @ 22:25:27
Gracias Pablo!!! …creo qno había otro momento mejor para este post! como dice Marta.. en el dia indicado y en el momento justo!
He sentido como se me removía todo por dentro al leerlo…. enfado, tristeza, desahogo y por fin, después de mucho reflexionar, fuerza!
Y es que,…que atrapada me siento tantas y tantas y tantas veces por este limitante!
Me temo que hay mucho trabajo por delante…! Gracias Pablo por tu empujoncito!
Me quedo con:
Aceptemos en nosotros cosas que hemos escogido, pero que les puedan disgustar a los demás. !No busquemos permanentemente la aprobación de los otros!
Pablo Villanueva
oct 04, 2013 @ 06:17:14
Hola Chusi! Me alegra que el empujoncito te haya servido.
Aceptemos. ACEPTEMOS, así en general. Y con mayúsculas. Un abrazo bien grande!!
Rodrigo
oct 11, 2013 @ 11:59:45
Casualmente… estoy releyendo un pequeño librito titulado ‘101 cuentos clásicos de la India’, recopilados por Ramiro Calle.
Aparece el mismo cuento pero el final es distinto, termina así:
… y el maestro concluyó:
_ Así debes ser tú: indiferente, como un muerto, a los halagos y a los insultos de otros.
El maestro dice: Quien hoy te halaga, mañana te puede insultar, y quien hoy te insulta, mañana te puede halagar. No seas como una hoja a merced del viento de los halagos e insultos. Permanece en ti mismo más allá de unos y otros.
La verdad es que a mi también me ha servido para reflexionar sobre la importancia que en mi tiene la ‘opinión’ de los demás…
abrazos
Pablo Villanueva
oct 11, 2013 @ 22:09:03
Gracias amigo. Siempre es un placer contar con tu visita. Anótate esta frases para más adelante: «Permanece en ti mismo más allá de unos y otros»
Un abrazo grande, Rodrigo!